viernes, 26 de enero de 2018

Presentando a mi nueva Z

Queridos amigos, vengo a presentaros al relevo de la Roadwin.

Desde el pasado jueves 11 soy el feliz poseedor de una Kawasaki Z650. Aquí os la enseño:

La noche anterior a esta foto la había pasado en la calle, pobrecita

¿Por qué esta moto?

Casi desde el principio tenía claro que quería una moto naked. No me veo en una custom, no me gustan las trail, y aunque las deportivas están chulísimas no creo que sea lo más adecuado para alguien que empieza.

Por otro lado, desde chico me han encantado las motos de la marca Kawasaki por su estética; el color verde hacía mucho en este sentido, siempre ha sido mi color favorito.

Por todo esto, lo lógico es que mi atención se centrara hacia las Z o sus antecesoras las ER-6. Había mirado más las ER-6n porque las Z eran muy nuevas y en el mercado de segunda mano apenas había. Pero se me cruzó esta Z650 negra. Y tuve la oportunidad de elegir entre ella y una ER-6n preciosa, negra y verde.

Al final me decanté por la Z650 por varios motivos: el precio era casi el mismo, pero esta tiene ABS, es más nueva, tiene menos km, y tiene el asiento más bajo. Para quien no lo sepa, os aviso de que no soy alto, mido 173 cm.

No estoy contento con mi moto nueva, se nota en la foto

La compré al concesionario Laglisse, en Madrid, y la compra ha sido más bien accidentada; primero, porque escribí al anuncio a pesar de que no tenía ninguna foto, así que no estaba del todo seguro de que fuera un anuncio real; por suerte, resultó serlo. Segundo, porque pasé unos días sin saber nada del envío, hasta que conseguí ponerme en contacto con la empresa que enviaba la moto. Y tercero, y más frustrante, porque la moto me llegó con la batería muerta: no arrancaba. Le puse gasolina por si acaso, pero nada. Al final conseguí arrancarla comprando un arrancador en Amazon (que, por cierto, se retrasó en llegar).

Luego problemas con el seguro, porque muchas compañías no me aseguraban, y otras me daban unos precios desorbitados. Al final, todo riesgo con Mapfre, 650 € (razonable, aunque es más de lo que pagué por el todo riesgo con mi Ibiza en el primer año).

Y por última, que tenía moto sin que me hubiera llegado siquiera el carné provisional…

(A día de hoy ya tengo mi carné definitivo:)

Me he sacado el carné de moto justo a tiempo para no tener que renovar el de coche (y pagar sus tasas correspondientes)
 
Paso a paso fuimos resolviendo todos estos problemas, y el miércoles pasado por fin pude estrenarla. Un viajecito de ida y vuelta que me hice hasta Santiponce, para enseñársela a mi profe de prácticas.

¿Impresiones? A ver:
  • Pesa. No es que pese demasiado, pero se nota la diferencia de peso.
  • El cambio de marchas va de fábula, y el indicador de marcha engranada es de lo más útil.
  • Contra todo pronóstico, es más fácil de conducir que la Roadwin. Tiene mayor radio de giro y el hecho de que al ralentí la moto ya ande es una pasada. Me resulta más fácil hacer filtering con ella.
  • He notado muchísimo la diferencia de potencia. Aun estando limitada a 47 CV, a veces me asusto de lo que tira dándole un poco de puño.
A ver si puedo salir este fin de semana de ruta con ella y puedo comprobar impresiones en trayectos más largos. Ya os contaré.

No hay comentarios:

Publicar un comentario