Hoy os escribo muy contento porque hace un rato he vuelto del reconocimiento médico.
Tenía cita a las 19:30, y tras un pequeño contratiempo porque no llevaba dinero en efectivo (se me había olvidado por completo prepararlo), me pudieron hacer el reconocimiento. Nada especial: me revisaron la vista (llevaba lentillas así que fue perfectamente), me hicieron una audiometría, me auscultaron y me miraron el oído, y por último me hicieron una prueba con una máquina del año de la polca para comprobar, según decía la máquina, mi coordinación bimanual.
Siempre he sido una persona con una coordinación horrible. De hecho creo que ese fue mi gran problema para sacarme el permiso B. Aún hoy, con 32 años, me cuesta la vida coger algo cuando me lo tiran al vuelo, por ejemplo, o hacer algo a la vez con la mano y con la pierna.
Sin embargo, el test de hoy me ha ido sorprendentemente bien. Tan bien que la psicóloga que me reconocía, que estaba en otra sala, pensaba que había terminado porque la máquina no sonaba (pita cada vez que hay un error), y lo que ocurría era, simplemente, que no estaba fallando.
Así que genial, con el certificado me he ido corriendo a la autoescuela antes de que cerraran, se lo he entregado, y la pequeña decepción ha sido que los plazos no son como me dijeron ayer. Al final, el lunes 16 presentan los papeles en la DGT y el viernes 20 les responderán, con lo cual ese viernes sabré la fecha de mi teórico (no antes del lunes 23).
Por lo pronto, mañana he quedado con mi amigo Miguel para ver si montamos un rato en bici, que creo que me vendrá bien.
No hay comentarios:
Publicar un comentario